Las redes Wi-Fi gratuitas pueden ser de gran ayuda cuando te quedas sin datos celulares de manera inesperada o cuando estás de viaje. Sin embargo, no todos son conscientes de los riesgos al utilizar estas redes y pueden convertirse en víctimas de hackers. Por lo tanto, descubramos qué es una red Wi-Fi no segura, qué riesgos conlleva y cómo minimizarlos utilizando una VPN.
¿Cuál es la diferencia entre redes Wi-Fi seguras y no seguras?

Las redes que no requieren ninguna autorización ni siquiera una contraseña se consideran no seguras. Estas redes generalmente no tienen ningún mecanismo de seguridad integrado y no cifran los datos de los usuarios. El uso de Wi-Fi no segura expone al usuario a riesgos, por lo que es necesario utilizar una VPN gratis para proteger los datos.
Aunque el requisito de autorización es casi la única forma para un usuario promedio de determinar si una red es segura, este indicador por sí solo no es representativo. Por lo tanto, debes considerar todas las redes públicas como no seguras por defecto y comportarte en consecuencia.
Una red puede considerarse segura si el propietario ha tomado medidas para cifrar los datos de los usuarios de la red, requiere autorización para acceder y cambia regularmente las contraseñas. Cuando visitas un restaurante o esperas en el aeropuerto, no podrás obtener información precisa sobre la seguridad de la red, así que considera todos los puntos de acceso públicos como potencialmente peligrosos.
El simple hecho de necesitar ingresar una contraseña o aceptar los términos de uso no garantiza tu seguridad. Cualquiera puede obtener una contraseña al pedir una taza de café en un café, y la página de términos de uso funciona más como una página de bienvenida.
¿Cuáles son los riesgos de usar redes Wi-Fi no seguras?
Existen varias formas en las que los atacantes intentan obtener los datos de usuarios de Wi-Fi no seguras.

1. Ataques de intermediario (Man in the Middle).
Este tipo de ataque implica que un hacker puede intentar acceder a tus datos utilizando el Protocolo de Resolución de Direcciones (ARP) para envenenamiento. Un atacante puede usar herramientas especializadas para escanear la red Wi-Fi pública en busca de la dirección IP del router y tu dispositivo. Luego pueden descubrir la dirección MAC (Media Access Control) de tu dispositivo y router enviando mensajes ARP falsos. Esto le da al hacker la capacidad de suplantar tu dispositivo y robar toda la información que se transmite entre tú y los sitios web que visitas.
2. Suplantación de DNS (DNS spoofing).
Los servidores DNS funcionan como una especie de guía telefónica virtual. Cuando ingresas los nombres de los sitios web en la barra de direcciones, los convierten de URLs legibles para humanos a direcciones IP legibles para las máquinas. Este tipo de ataque es altamente peligroso y ocurre si un atacante ha logrado acceder a tu dispositivo o router Wi-Fi a través de envenenamiento ARP. En este caso, pueden redirigirte a un sitio web de phishing cuando intentas acceder a un sitio confiable y conocido. El problema es que los usuarios ven la URL del sitio al que planeaban acceder y ni siquiera se dan cuenta de que están siendo redirigidos a un sitio malicioso.
3. Malware y ransomware.
El malware es un término para software que se instala en una computadora sin el permiso del usuario y es utilizado por los hackers para realizar tareas maliciosas como robo de dinero o contraseñas. Los hackers pueden redirigirte a enlaces que descargan automáticamente malware o enviarte correos electrónicos con tales enlaces. Una vez que tu dispositivo está infectado, no solo un atacante puede acceder a todos los datos en él, sino que también podrían acceder incluso si te desconectas de una red Wi-Fi pública. Un tipo de malware que impide a los usuarios acceder a los sistemas informáticos hasta que se pague una cierta cantidad de dinero se llama ransomware. El ransomware ofrece la posibilidad de restaurar tus datos a cambio de una gran suma de dinero, pero frecuentemente, incluso después de pagar el dinero, los datos nunca se recuperan.
4. Falsos puntos de acceso (Fake hotspots).
Los criminales a menudo configuran sus propias redes Wi-Fi gratuitas en lugares concurridos, como centros comerciales, aeropuertos o estaciones de tren. Hoy en día, es bastante barato y fácil de hacer. Nombran estas redes con nombres apropiados, por ejemplo, “Airport_Free_Wi-Fi”. Por eso es importante verificar el nombre de la red a la que intentas conectarte. Cuando los usuarios descuidados usan tales redes, los hackers obtienen acceso a sus datos y generalmente infectan el dispositivo con malware.
Usando estas técnicas, los atacantes pueden tomar posesión de los datos de los usuarios, incluida información financiera como detalles de tarjetas y credenciales bancarias en línea, información personal sensible y datos de trabajo confidenciales.
Sin embargo, es imposible abandonar por completo el uso de redes públicas. Todos enfrentamos la necesidad de conectarnos a una red no segura tarde o temprano, por lo que vale la pena estar preparado y cuidar la seguridad de antemano.
¿Cómo puede una VPN gratuita minimizar los riesgos de usar redes Wi-Fi públicas?

VPN es una tecnología que te permite crear un canal seguro para la transmisión de datos incluso en redes no seguras. Esto es posible gracias al cifrado de datos y la redirección a través de un túnel seguro a través de un servidor VPN remoto. Esto oculta la dirección IP del usuario, ya que el destinatario final de los datos ve solo la dirección IP del servidor VPN.
Dado que los usuarios se conectan más a menudo a redes públicas desde dispositivos móviles, es importante configurar una aplicación VPN en smartphones y tabletas. Siempre descarga aplicaciones solo de tiendas oficiales. VPN gratuita para Android está disponible en Play Store, y para IOS en App Store.
La diferencia entre VPNs gratuitas y de pago es el número de servidores disponibles y las funciones adicionales. Esto no afecta la seguridad básica, por lo que una VPN gratuita es efectiva para proteger tus datos al usar redes Wi-Fi públicas. Elije proveedores confiables que tengan una estricta política de no registro, ofrezcan un sólido cifrado de 256 bits y utilicen protocolos VPN modernos.
De esta manera, puedes proteger tus datos sin costo adicional. Los datos cifrados se vuelven casi inaccesibles para intrusos. El robo de datos es muy difícil cuando la información se transmite a través de un canal creado por el túnel VPN, y la dirección IP del usuario está oculta. Además, incluso si se obtiene, esos datos son muy difíciles de descifrar.
Así que, ten en cuenta los riesgos del Wi-Fi gratuito e instala una VPN con anticipación para que puedas conectarte de manera segura a redes Wi-Fi públicas si es necesario.