En este artículo exploraremos qué son los centros de datos o data center, su papel crucial en la infraestructura de TI y las mejores prácticas para garantizar su seguridad.
Profundizaremos además en las tecnologías y las soluciones de seguridad necesarias para proteger los datos de la empresa, un aspecto fundamental en el contexto de la ciberseguridad de los centros de datos.
Tabla de Contenido
¿Qué son los centros de datos y para qué sirven?
Un centro de datos (data center) es una estructura diseñada para albergar un conjunto de infraestructuras digitales, como sistemas de almacenamiento, servidores, redes y otros dispositivos críticos utilizados para el procesamiento y la gestión de datos.
Los centros de datos empresariales representan el corazón de las operaciones de TI, gestionando servicios cruciales como aplicaciones empresariales, servicios en la nube y análisis de datos.
Los centros de datos pueden configurarse como estructuras on-premise, es decir, ubicadas físicamente dentro de la empresa, o basarse en soluciones de computación en la nube proporcionadas por terceros. Independientemente de la configuración, un centro de datos debe diseñarse para garantizar una operación continua, un alto rendimiento y la máxima seguridad.

¿Por qué la seguridad de los centros de datos es fundamental?
La ciberseguridad de los centros de datos es esencial para proteger los datos de la empresa de amenazas como ataques informáticos, fallos de hardware y desastres naturales. Desde el punto de vista de la seguridad, se distinguen dos ámbitos principales:
- Seguridad física: Se refiere a la protección de la infraestructura física mediante el uso de sistemas de seguridad como cámaras, accesos biométricos y vigilancia 24/7.
- Seguridad digital: Se centra en la defensa contra ataques de hackers mediante firewalls, encriptación y monitoreo de redes.
Invertir en soluciones de seguridad adecuadas es fundamental para garantizar la continuidad operativa y reducir el riesgo de pérdida de datos.
Elementos clave de la infraestructura de TI en los centros de datos
Un centro de datos empresarial está compuesto por una serie de elementos que trabajan en sinergia para respaldar las operaciones digitales. Entre ellos:
- Sistemas de almacenamiento: Para la conservación segura y confiable de los datos.
- Sistemas de refrigeración: Para mantener una temperatura óptima y prevenir fallos de hardware.
- Infraestructura física: Incluye servidores, cableados y dispositivos de red.
- Sistemas de seguridad: Garantizan la protección física y digital del centro de datos.
Estos elementos hacen del centro de datos una estructura compleja pero indispensable para las empresas modernas.
Cómo proteger un centro de datos: estrategias y soluciones
La protección de un centro de datos es un desafío complejo que requiere un enfoque holístico y multinivel. La combinación de seguridad física, soluciones tecnológicas avanzadas y protocolos operativos claros es esencial para garantizar la continuidad e integridad de las operaciones empresariales.
Veamos en detalle algunas de las estrategias y soluciones más eficaces para garantizar la seguridad de los centros de datos.

Seguridad física: una primera línea de defensa
La seguridad física es fundamental para proteger la infraestructura física del centro de datos de accesos no autorizados o daños accidentales. Estas son algunas medidas clave que se deben adoptar:
- Control de accesos: Utilizar sistemas avanzados como tarjetas RFID, accesos biométricos (huellas dactilares, escaneo del iris) y códigos PIN para limitar la entrada solo al personal autorizado.
- Videosorveglianza: Instalar cámaras de seguridad con grabación continua para monitorear y registrar las actividades dentro y fuera del centro de datos.
- Protección perimetral: Barreras físicas, cercas y sistemas de detección de intrusiones pueden prevenir accesos no autorizados.
- Planes de emergencia: Preparar y probar regularmente los procedimientos de evacuación y respuesta a eventos como incendios, inundaciones o terremotos.
La combinación de estas medidas garantiza que la infraestructura física esté protegida de amenazas externas e internas.
Seguridad digital: la defensa de los datos
Desde el punto de vista digital, la protección de la información gestionada en los centros de datos empresariales requiere la implementación de robustas soluciones de ciberseguridad. Algunas de las mejores prácticas incluyen:
- Firewalls y sistemas de detección de intrusiones: Herramientas fundamentales para bloquear ataques externos e identificar comportamientos sospechosos.
- Encriptación de datos: Garantizar que los datos, tanto en tránsito como en reposo, estén encriptados y, por lo tanto, inutilizables en caso de robo.
- Segmentación de la red: Separar las diferentes áreas de la red para limitar los daños en caso de violación.
- Autenticación multifactorial (MFA): Requerir múltiples niveles de verificación para acceder a los sistemas críticos.
- Monitoreo continuo: Utilizar software de análisis en tiempo real para identificar y mitigar posibles amenazas antes de que puedan causar daños.
Estas prácticas refuerzan la ciberseguridad del centro de datos, haciéndolo resistente a las crecientes amenazas informáticas.
Implementación de un plan de recuperación ante desastres
Un evento imprevisto, como un fallo técnico, un incendio o un ataque informático, puede causar graves interrupciones en las operaciones empresariales. Por este motivo, cada centro de datos debe estar equipado con un plan de recuperación ante desastres bien definido. Las componentes clave de un plan eficaz incluyen:
- Copias de seguridad regulares: Guardar copias de los datos críticos en sistemas separados, preferiblemente en una ubicación remota.
- Replicación de sistemas: Tener una copia exacta de la infraestructura de TI en otro sitio para garantizar la continuidad de las operaciones.
- Pruebas periódicas: Simular escenarios de emergencia para verificar que el plan funcione como se espera.
- Priorización de recursos: Determinar qué sistemas y aplicaciones deben restaurarse primero en caso de emergencia.
Un plan de recuperación ante desastres bien planificado y actualizado regularmente reduce el tiempo de inactividad y protege los datos de la empresa.
Sistemas de refrigeración y gestión de la energía
La temperatura es un aspecto crítico para la funcionalidad de los centros de datos. Un sobrecalentamiento puede provocar fallos de hardware irreversibles. Estas son algunas estrategias para gestionar eficazmente la temperatura y la alimentación:
- Sistemas de refrigeración avanzados: Utilizar tecnologías como la refrigeración por agua o sistemas de aire comprimido para mantener un ambiente estable.
- Monitoreo de la temperatura: Instalar sensores que avisen en caso de sobrecalentamiento.
- Redundancia en la alimentación eléctrica: Tener generadores de emergencia y sistemas SAI (Sistema de Alimentación Ininterrumpida) para garantizar una alimentación constante incluso en caso de interrupción.
Estas medidas protegen los componentes físicos del centro de datos y garantizan la continuidad de las operaciones.
Formación del personal
Incluso el mejor sistema de seguridad puede verse comprometido por errores humanos. Por lo tanto, la formación del personal es esencial para garantizar que todos comprendan los procedimientos y las tecnologías utilizadas. Los temas que se deben incluir en la formación son:
- Reconocer y responder a amenazas informáticas;
- Comprender los procedimientos de emergencia;
- Utilizar correctamente los sistemas de control de accesos.
La concienciación y la preparación del personal contribuyen a una seguridad de los centros de datos más robusta.
Soluciones en la nube e híbridas
Muchos centros de datos empresariales están adoptando modelos basados en la computación en la nube o configuraciones híbridas. Este enfoque permite:
- Escalar los recursos según las necesidades;
- Mejorar la flexibilidad operativa;
- Reducir los costes relacionados con el mantenimiento de la infraestructura física.
Sin embargo, es importante implementar medidas de seguridad también para los servicios en la nube, garantizando que los proveedores cumplan con estándares elevados de protección de datos.
Auditorías y cumplimiento normativo
Por último, un aspecto a menudo descuidado pero fundamental es garantizar que el centro de datos cumpla con las normativas locales e internacionales en materia de protección de datos. La realización de auditorías de seguridad periódicas ayuda a identificar y resolver posibles vulnerabilidades.
Clasificación de los centros de datos: el sistema de niveles
Un aspecto crucial en el diseño de un centro de datos es su clasificación según el sistema de niveles de los centros de datos. Esta escala define los niveles de fiabilidad y resiliencia, con el Nivel 1 que representa el nivel básico y el Nivel 4 el más avanzado, capaz de garantizar una operatividad cercana al 100 %.
La importancia de la computación en la nube en los centros de datos
Con el crecimiento de los servicios en la nube, muchas empresas optan por integrar la computación en la nube en sus operaciones. Esta opción permite una mayor escalabilidad y reducción de costes, aunque requiere una atención especial a la seguridad y la gestión de los recursos.
Conclusiones
Los centros de datos son el núcleo de las infraestructuras de TI modernas y desempeñan un papel crucial en la gestión de los datos empresariales. Para protegerlos, es esencial invertir en tecnologías avanzadas y adoptar prácticas eficaces de ciberseguridad.
Con la evolución del panorama tecnológico, garantizar la seguridad de los centros de datos sigue siendo un desafío fundamental para las empresas de todos los sectores.
Preguntas y respuestas
Estructuras dedicadas a la gestión y el almacenamiento de los datos empresariales.
Gestionan aplicaciones, datos y servicios críticos para las empresas.
Amenazas físicas, ataques informáticos y fallos de hardware.
Con sistemas de control de accesos, vigilancia y protecciones perimetrales.
Una solución para escalar recursos y reducir costes aprovechando los servicios en la nube.
Permite restaurar rápidamente los datos y la operatividad en caso de emergencia.
Una clasificación que define el nivel de fiabilidad del centro de datos.
Servidores, sistemas de almacenamiento, refrigeración e infraestructura física.
Utilizando herramientas de monitoreo continuo y análisis en tiempo real.
Los centros de datos on-premise son locales, mientras que los de la nube son alojados por terceros.