Durante años, reparar un móvil roto era casi una misión imposible. Las marcas controlaban por completo las piezas, los manuales de reparación y el software, obligando a los usuarios a pasar por sus servicios oficiales si querían arreglar algo tan simple como una pantalla o una batería. Pero eso está cambiando.
El llamado “derecho a reparar” está dando poder a los consumidores: ahora, tú tienes más opciones para decidir qué hacer cuando tu teléfono se estropea. Apple, Samsung, Xiaomi y otros gigantes tecnológicos han tenido que adaptarse, brindando repuestos y manuales para que cualquiera logre reparar su dispositivo o acudir a un técnico independiente.
El derecho a reparar: una victoria del usuario
El derecho a reparar nace como una respuesta a la llamada “obsolescencia programada”, esa práctica mediante la cual los dispositivos parecían estar diseñados para durar solo unos años. Muchos usuarios se veían obligados a cambiar de móvil por una pequeña avería que no podían reparar.
Ante esta situación, tanto la Unión Europea como distintos países han impulsado leyes que obligan a los fabricantes a ofrecer repuestos originales, manuales y herramientas.

Esto significa que, por primera vez, tú decides: puedes reparar tu móvil en casa, llevarlo a un servicio técnico de tu confianza o seguir optando por el servicio oficial si lo prefieres. Es un cambio que fomenta la sostenibilidad, reduce los residuos electrónicos y, sobre todo, te devuelve el control sobre tu propio dispositivo.
Apple y Samsung, obligados a abrir sus piezas
Apple fue una de las primeras compañías en adaptarse, aunque con cierta resistencia inicial. Su programa “Self Service Repair” admite que los usuarios compren piezas y herramientas oficiales para modelos como el iPhone 12, iPhone 13 y posteriores. De hecho, ya puedes encontrar fácilmente, repuestos de alta calidad, como una iPhone 13 Pro pantalla, lista para sustituir tú mismo si tienes algo de maña.
Samsung también se ha sumado a la tendencia. En Europa, la compañía surcoreana tiene piezas originales para algunos de sus modelos más populares, aparte de guías detalladas para el reemplazo de pantallas, baterías o cámaras. Este cambio no solo favorece al consumidor, sino que ha abierto la puerta a una nueva generación de tiendas y técnicos especializados.
España y el auge del mercado de repuestos
En España, el derecho a reparar está ganando terreno rápidamente. Cada vez más personas prefieren reparar en lugar de reemplazar, tanto por ahorro como por responsabilidad ambiental. Pero claro, hacerlo bien requiere confianza en las piezas que se usan.
Ahí es donde entran en juego empresas especializadas en repuestos de calidad, porque sí, lo de iLevante son repuestos. Esta tienda online se ha vuelto una gran referencia dentro del sector, con pantallas, baterías y componentes para las principales marcas del mercado: Apple, Samsung, Xiaomi, Huawei, Oppo y muchas más.
Lo mejor es que no solo venden los repuestos, pues facilitan herramientas, protectores y todo lo necesario para hacer el cambio tú mismo. Asimismo, sus envíos suelen llegar en apenas 24 horas, algo genial si tu móvil se ha roto y lo necesitas cuanto antes.
Reparar tu móvil tú mismo: más fácil de lo que crees
Antes parecía impensable abrir un iPhone o un Galaxy sin miedo a romperlo aún más. Pero con los tutoriales actuales, las herramientas adecuadas y un poco de paciencia, muchas reparaciones básicas están al alcance de cualquiera. Cambiar una pantalla, una batería o incluso el conector de carga puede hacerse en casa, sin necesidad de un laboratorio.
Claro, hay que tener precaución y seguir los pasos indicados, pero la satisfacción de hacerlo uno mismo y ahorrar dinero no tiene precio. Incluso, si prefieres no arriesgarte, siempre puedes acudir a un técnico independiente que utilice piezas originales o de calidad equivalente, algo que el derecho a reparar promueve.





